Acerca de La Sociedad

LA SOCIEDAD TEOSÓFICA

La Sociedad Teosófica es una organización dedicada a promover el conocimiento de la unidad de toda la vida y fomentar el estudio de las religiones, filosofías y la ciencia, de modo que podamos entendernosmejor a nosotros mismos y nuestro lugar en el universo. A través de la literatura y diversas actividades, la Sociedad Teosófica ofrece varias enseñanzas y valores para consideraciónindividual, pero no hay doctrina u opinión que sea obligatoria de ninguna manera.
Fue fundada en 1875 en Nueva York. Actualmente la Sede Internacional se encuentra en Adyar, Madrás (Chennai), India. Hoy la Sociedad Teosófica tiene alcance mundial. Está presente en unos 60 países, estando organizada en Secciones Nacionales, cada una de las cuales está compuesta por grupos de estudio llamados Ramas o Logias, a las cuales se afilian las personas que deciden hacerse miembros de la Sociedad.
La Teosofía es la sabiduría que subyace en todas las religiones cuando se les quita todas las adiciones y supersticiones. Ofrece una filosofía que hace la vida comprensible y demuestra que la justicia y el amor guían al cosmos. Sus enseñanzas ayudan al desarrollo de la naturaleza espiritual latente del ser humano, sin dependencia o temor.
 LOS TRES OBJETIVOS
1.   Formar un núcleo de la Fraternidad Universal de la Humanidad, sin distinción de raza, credo, sexo, casta o color.
2.   Fomentar el estudio comparativo de la Religión, Filosofía y Ciencia.
3.   Investigar las leyes inexplicables de la Naturaleza y los poderes latentes en el hombre.

NO HAY RELIGIÓN MÁS ELEVADA QUE LA VERDAD

Este es el lema de la Sociedad. La Sociedad Teosófica está compuesta de estudiantes pertenecientes a cualquier religión del mundo o a ninguna, que se sienten unidos por una probación de los Objetivos de la Sociedad, por su deseo de hacer desaparecer los antagonismos religiosos y por reunir a los hombres de buena voluntad, independientemente de sus opiniones religiosas y por su deseo de estudiar las verdades religiosas y de compartir los resultados de sus estudios con los demás.
Su nexo de unión no es la profesión de una creencia común, sino una búsqueda y aspiración comunes por la Verdad. Afirman que esa Verdad debería alcanzarse mediante el estudio, la reflexión, la pureza de vida y la devoción a unos altos ideales, y consideran a la Verdad como un premio al que hay que aspirar, no como un dogma que pueda imponer ninguna autoridad.
Consideran que las creencias deberían ser resultado del estudio individual o de la intuición, y no su antecedente, y que deberían basarse en el conocimiento, y no en las afirmaciones. Extienden la tolerancia a todos, incluso hacia los intolerantes, no como un privilegio que conceden sino como un deber que cumplen, e intentan acabar con la ignorancia en vez de castigarla.
Consideran que todas las religiones son una expresión de la Sabiduría Divina y prefieren su estudio a su condena y su práctica al proselitismo. La paz es su consigna y la Verdad es su objetivo.

HISTORIA DE LA LOGIA TEOTL EL SALVADOR

Los datos aquí apuntados, me fueron referidos por los Hnos. Salvador Sagastizado, Juan Felipe Toruño y Andrés Soriano, contemporáneos del Ing. Max Patricio Brannon a quien él se los contó personalmente y que fueron después confirmados por Carmen Brannon (Claudia Lars) su hija.
Respecto a los datos de Soledad Lara, ella me los refería en los ratos de tertuliay reposo que teníamos; desde luego, los datos recientes los observamos de visu. 
Alfredo Rodríguez Velásquez.
San Salvador, noviembre de 1987.

El objetivo final de la Sociedad Teosófica era establecer las bases para lograr una sociedad más humana, más comprensiva, sin guerras, sin confrontaciones, sin hambre, es decir, reducir al mínimo el sufrimiento de los sectores más marginados de la sociedad y vivir en un mundo de paz.
Con estos propósitos tan altruistas, tendría para empezarse por modificar los conceptos religiosos y filosóficos que regían en el mundo occidental en esa época, volver a la enseñanza de la Sabiduría  Antigua hacía mucho tiempo abandonada y recordar y comprender la existencia de un Plan Divino para la evolución del hombre y toda criatura sobre la tierra.
Atraídos por tan noble ideal e interesado en la posibilidad de conocer tan elevadas enseñanzas, no fue de extrañar que muchos hombres de abierta mentalidad y descontentos de la religión reinante de la época, se acercaran a la Sociedad Teosófica en busca de conocimiento.
Este hecho se observaba en todo el mundo por lo que, a finales del siglo XIX, existían ya en El Salvador miembros sueltos, afiliados a la Secretaría General de Cuba.
A finales del siglo XIX llegó a El Salvador, contratado por la compañía que construía el ferrocarril de occidente, el Ing. y Arq. Max Patricio Brannon, irlandés de origen, quien, una vez terminado el ferrocarril, se quedó a vivir en nuestro país. Contrajo nupcias con una bella joven, Carmen Vega Zelayandía, salvadoreña, y procreó una honorable familia. Hija de ese hogar fue la poetisa salvadoreña Margarita del Carmen Brannon Vega más conocida por su seudónimo literario de Claudia Lars.
Establecido definitivamente, en El Salvador, el Ing. Brannon conoció al Sr. Luis Van Dyke, de origen holandés, con el que hizo una muy buena amistad que duró muchos años.
Aconteció  que, el Ing. Brannon, fue contratado para construir unas casas en la Punta de Amapala, en el Golfo de Fonseca y una noche que se encontraba descansando en la habitación del hotel donde se hospedaba, se desató una tormenta huracanada que lo obligó a iluminar el ambiente con una pequeña vela…
De pronto y muy violentamente, la puerta del cuarto se abrió y entró el Sr. Van Dyke llevando de la mano a una señora de aspecto joven y vestida con ropa a la antigua. El Ing. Brannon observó que su amigo le hablaba, pero no lograba entenderle y que su cuerpo poco a poco se iba desvaneciendo…
El Sr. Brannon, asustado, salió inmediatamente al corredor del hotel preguntando si habían visto a un hombre y a una mujer salir de su habitación. Todas las respuestas eran ¡no!
Posteriormente el Sr. Brannon recordó que su amigo Van Dyke, en sus ratos de remembranza, le contaba que su esposa había fallecido muy joven y, al relacionar la aparición de la pareja en su habitación, comenzó a sospechar la existencia de un mundo oculto que necesitaba investigar.
A partir de ese momento, comenzó a leer buscando obras que lo relacionaran con ese mundo que le parecía tan cerca y sin embargo tan lejos.
Leyó “El Gran Alberto”, “El Pequeño Alberto” y otros muchos, hasta que un viejo amigo le regaló un pequeño libro escrito en hebreo… Anduvo de un lado para otro sin encontrar quién se lo tradujera, hasta que, al fin, un anciano de origen hebreo lo hizo.
El librito aconsejaba al investigador, sacrificar un gato negro a las doce de la noche, en luna nueva y en un cementerio como requisito para entrar en contacto con seres de otro mundo. Todo lo hizo al pie de la letra, y… nada.
Desilusionado, salió del cementerio, montó su caballo y se alejó, cabalgaba por veredas porque el cementerio estaba lejos de la ciudad.
De pronto, oyó el ruido de caballos que se aproximaban. Eran dos jinetes… lo saludaron y conversaron en inglés. El se sentía feliz por tan magnífica compañía y hablando y hablando, llegaron al hotel.
Buscaron el bar y el Sr. Brannon pidió whisky y además un cuarto para sus acompañantes… ante esto, el mozo se mostró extrañado, pues no veía a los acompañantes del Sr. Brannon, sin embargo sirvió los tragos pensando que eran alucinaciones del ingeniero quien, al terminar su trago, se retiró a su cuarto dejando a sus amigos en el bar.
Había dormido un poco cuando muchos ruidos lo despertaron y sobresaltado vio que sus amigos estaban haciendo un gran escándalo en su cuarto, furioso los invitó a salir amenazándolos con llamar a la policía.
El Sr. Brannon de alguna forma logró comprender que a estos individuos solamente él podía verlos y que si tomaba alguna medida en contra de ellos lo tomarían por un loco.
Así transcurrieron los días y las noches y los aparecidos no salían de su cuarto. ¡No había manera de sacarlos! Y los fantasmas le hacían la vida imposible.
Cansado, desesperado, sin hallar cura a su mal, supo que en Estados Unidos, en Nueva York, estaba una señora de grandes y maravillosos poderes, de apellido Blavatsky, y sin mucho pensarlo reunió el dinero necesario para hacer el viaje y, llevando en su corazón una gran esperanza, llegó al puerto de La Libertad donde se embarcó.
Durante el tiempo que duró la travesía, no logró liberarse de la presencia de los fantasmas.
Llegó a Nueva York en diciembre de 1878. Visitó a unos familiares y luego, el 16 de diciembre buscó a la Sra. Blavatsky.  Lamentablemente le dijeron que la Sra. Blavatsky y el Sr. Olcott habían partido el día anterior hacia Londres, que su ruta era hacía India porque allí trasladarían la Sede Central de la Sociedad Teosófica.
Desconsolado se paseaba por las calles de Nueva York, cuando se encontró con un amigo que había trabajado con él en la construcción de vías férreas en Perú y quien le manifestó que necesitaba a una persona para ir a Londres a comprar rieles para el ferrocarril.
Al preguntarle que si le gustaría ir, el Sr. Brannon contestó que sí.
Arreglados los pormenores, lleno de júbilo, partió para Londres, en donde, luego de hacer las compras y arreglar lo del embargue, buscó a la Sra. Blavatsky que estaba alojada en la casa del Dr. y la Sra. Billing, cerca de la Norwood Park.
Se anunció y pidió hablar con ella. La Sra. Blavatsky lo hizo pasar inmediatamente diciendo: “hagan pasar al vaquero”. Después de saludarle quiso exponerle su caso, pero ella no se lo permitió, pues en forma muy contundente le expresó: “yo ya lo conozco”; lo regañó, lo aconsejó y luego, al despedirlo, sacó de su dedo un anillo y diciéndoles: “póngaselo y llévelo hasta que los duendes que lo persiguen se retiren, hasta entonces me lo trae”.
La presencia de los fantasmas se fue haciendo cada vez menos notoria, hasta que por fin desaparecieron definitivamente a los tres días. El Sr. Brannon regresó a devolver la sortija y en esa ocasión, Blavatsky le entregó un paquete que contenía dos retratos de los Maestros de Compasión y Sabiduría, varios libros de Teosofía y una tarjeta de felicitación con su firma estampada en ella, recomendándole que se lo entregara a la primera Logia Teosófica que se fundara en el país. Se despidió de ella agradeciéndole.
31 años transcurrieron para que el Sr. Brannon entregara los retratos y los libros. Su participación en la fundación de la Logia “Teotl” fue muy valiosa puesto que, impelido por la necesidad de cumplir su compromiso, buscó, halló y reunió a todos los teósofos sueltos que había en la ciudad y que pertenecían a la Secretaría General de Cuba.

LOS RETRATOS DE LOS MAESTROS
Estos retratos corresponden al Maestro KH y al Maestro Morya; sus dimensiones son de 45x45 cm.; de color sepia. No son fotografías, ni pintados al óleo, fueron realizados por precipitación mental de la Sra. Blavatsky.
Según el Hno. Sagastizado y el Hno. Juan Felipe Toruño se conservan en perfecto estado a pesar de sus 106 años (1985). Fueron cuidados en sus primeros años por el Sr. Brannon, después por los miembros de la Sociedad Teosófica y últimamente por los miembros de la Escuela Esotérica Teosófica.
De estos retratos sólo hay tres en el mundo: Londres, Adyar y El Salvador.

FUNDACIÓN DE LA LOGIA “TEOTL”

La Logia “Teotl” fue fundada el 5 de junio de 1910, pero fue reconocida en el mundo teosófico, el 4 de julio de ese mismo año pues, en esa fecha, se le extendió su Carta Constitutiva. Esta carta fue firmada por el Secretario General de la Sección Cubana el Sr. Rafael Alvear y por la Presidenta Mundial de la Sociedad que en esa fecha era la Dra. Annie Besant.



ACTA DE FUNDACIÓN DE LA LOGIA TEOSÓFICA “TEOTL” DE EL SALVADOR
En San Salvador, a las dos de la tarde del día cinco de junio de mil novecientos diez, reunidos los infrascritos miembros de la Sociedad Teosófica: Dr. José Max Olano, Don Tomás Soley, Don Juan F. Orozco, Don Arturo Lara, Don Andrés Soriano, Don Julio Acosta, Dr. Reyes Arrieta Rossi, estando en número competente para fundar una Logia Teosófica de la Sección Cubana a que está adherida, resolvieron por unanimidad formarla y dirigirse al efecto a la Sociedad de aquella sección en solicitud de la Carta Constitutiva necesaria. En consecuencia se puso a discusión el nombre que ha de adoptar esta rama como distintivo y se decidió darle el nombre de “TEOTL”, nombre del idioma indígena de esta región, cuyo significado es el Dios o Divinidad Suprema, bajo cuya protección se pone al tomarlo. A continuación se procedió a elegir al Presidente, Secretario, Tesorero y Vocales, dando la elección el siguiente resultado:
Para Presidente:
Don J. Max Olano
Para Secretario:
Don Arturo Lara
Para Tesorero:
Don Juan F. Orozco
Como Vocales:
Don Tomás Soley

Don Arturo Acosta

Dr. Reyes Arrieta Rossi
Se nombró a los Drs. Don Max J. Olano, Don Tomás Soley y Don Julio Acosta, para que elaboraran el reglamento que había de regir los actos de esta rama y presentarlos para su aprobación una vez que hubiesen dado cumplimiento a su cometido.
Para terminar se dispuso por unanimidad y de una manera espontánea dirigir la solicitud de la Carta Constitutiva al Secretario de la Sección Cubana por intermedio de las Ramas ya establecidas en San José de Costa Rica y presididas por los Sres. Tomás Povedano y Don Roberto Brenes Mesen a quienes se encomendó encaminarla a su destino apoyándola con su influencia y fraternal cariño.
Esa solicitud la hará acompañando copia de esta acta.
Y no habiendo más de que tratar, se levanta la sección a las cinco horas de la tarde y firmamos todos.
J. Max Olano.
Tomás Soley
Juan F. Orozco
Reyes Arrieta Rossi
Julio Acosta
Arturo Lara
Andrés Soriano.

VIDA DE LA LOGIA
Como es de general observación, las Logias Teosóficas son casi siempre, pobres de bienes materiales y asistencia escasa. La Logia“Teotl”, no es la excepción…
En 1936, cuando yo la conocí, estaba alojada en la casa particular de una hermana, la Srita.  Ofelia Montalvo, en las vecindades de lo que fue fuera antes el Campo Marte. Allí pagábamos… La sala era estrecha, pequeña. Éramos más o menos doce miembros, teníamos pocos muebles. Sesionábamos los días viernes por lo que, el decir de los hermanos más antiguos, eran los mejores días.
Luego llegó una época de florecimiento: el Hno. General Maximiliano Hernández Martínez, era el Presidente de la República y debido a su entusiasmo, celebraba las sesiones de estudio en Casa Presidencial. Asistían su gabinete, hermanos teósofos y empleados de Casa Presidencial.
Todo lo que en las sesiones se trataba, se discutía, se opinaba, era tomado por taquígrafos y publicadas en folletos mimeografiados que se repartían entre los asistentes. ¡La Teosofía estaba de moda! ¡Era la novedad!
El General Hernández Martínez encomendó al Hno. Juan Felipe Toruño y al Hno. Salvador Sagastizado, buscar un nuevo local para alojar a la Logia. Nos mudamos al centro de la ciudad, al segundo piso de una casa de cemento armado, situada al costado oriente de la plaza “14 de julio”. Era grande, bien iluminada. El número de personas asistentes a las sesiones se multiplicó considerablemente unos, traídos por la propaganda, otros por curiosidad y la mayor parte buscando un camino para acercarse al presidente con miras de la obtención de un empleo.
Renació “Dharma”, la revista de difusión teosófica de la Logia “Teotl”. Se difundía mensualmente. Era el Hno. Juan Felipe Toruño el encargado de su redacción y difusión y, debido a que era periodista de profesión y que trabajaba en el Diario Latino, “Dharma” tuvo una muy buena acogida.
Al terminar su mandato el General Martínez, la Logia volvió a ser lo que era antes. Volvíamos a quedar los mismos hermanos, en un pequeño cuarto de un segundo piso de una casa vieja y deteriorada. Era la casa de una familia de edad adulta. El cuarto era alumbrado con un foco de 25 watts. Llegábamos a él entrando por el portón de un zaguán grande, un poco oscuro. Al fondo había una puerta que teníamos que tocar para que la abriera una ancianita delgada, con el pelo blanco muy parecida a esas muñequitas de las que ponen en los nacimientos de navidad.
Parecía muy suspicaz. Nos miraba de pies a cabeza y nos dejaba pasar hasta que nos identificábamos como “los inquilinos de arriba”. Subíamos por una escalera medio curva, con un poco de temor, no sólo por la semioscuridad sino también por las tablas flojas de la escalera.
Pero allí estaba nuestro refugio, nuestros libros, los retratos de los Maestros y nuestros pocos muebles y además, estábamos nosotros con nuestra alegría de estar juntos otra vez.

SOLEDAD LARA

Soledad Lara, de 60 años o más, piel morena, de unos 1.60 M. de altura y 160libras de peso; de carácter alegre y tremendamente dinámica. Hija de Mercedes Lara y Patrocinio Valladares Platero. Nació el 16 de agosto de 1890 en Mazatenango, departamento de Suchitupequez en Guatemala.
Huérfana de padre. Desde muy niña tuvo que trabajar duro junto a su madre para poder sobrevivir. Su madre murió cuando ella escasamente cumplía sus 16 años lo que hizo que ella quedara completamente sola. Aprendió a coser ropa de mujeres y niñas con una máquina de segunda mano que había comprado. La ropa que elaboraba la vendía en los pueblos vecinos. Viajaba en una burrita de su propiedad, cruzando los caminos polvorientos y soleados. Usaba un sombrero de palma, faldas anchas y largas. Conoció la Biblia a la que se abrazó con fervor.
Posteriormente se hizo profesora. Se inclinaba más a enseñar a leer y escribir.
Se casó con el señor Magdaleno de quien recibía mal trato por lo que decidió abandonarlo y, en secreto, planeo su fuga para El Salvador.
El día de la fuga tomó el tren muy de mañana y cuando el Sr. Magdaleno se dio cuenta se montó en su caballo y trató de alcanzar el tren.
Soledad se dio cuenta y afligida rogaba a todos los santos para que Magdaleno no alcanzara la máquina…El milagro se realizó y el hombre indignado se fue quedando atrás poco a poco.
Llegó a El Salvador y se estableció en Armenia (Sonsonate). Después de un tiempo de respiro, siguió su camino hacia San Salvador. Rápidamente encontró trabajo como ama de llaves en la casa de unos señores de apellido Bain de nacionalidad inglesa, empleados del Banco de Londres quienes, en cierta oportunidad, indicaron a Soledad que se deshiciera de unos libros que estaban en un cajón.
Soledad sintió lástima por tanto libro y antes de proceder a quemarlos empezó a hojearlos y… ¡Oh, qué maravilla! esos libros contenían un tesoro de sabiduría. En ellos encontró conceptos nuevos sobre Dios, el hombre, la naturaleza.
Los guardó para sí y empezó a leerlos uno a uno. ¡Eran libros de Teosofía!
Soledad era ambiciosa y tenía la rara suerte de transformar en dinero todo negocio que emprendía. Comprendió que comprar lotes de tierra y construir casas le significaría buenos ingresos.  Pero el problema era que no podía dirigir las construcciones y a eso se encaminó con ahínco.
Compraba frutas y golosinas y en canastos se los llevaba a los trabajadores que se dedicaban a la construcción de casas y, a cambio de  las frutas y golosinas, le enseñaron a todos los pormenores necesarios para la construcción.
No tardó mucho Soledad en empezar a construir sus propias casas y venderlas por mensualidades. Los bancos le prestaban dinero y poco a poco se fue haciéndose de un buen capital. Fundó también una cadena de tiendas a manera de supermercados. Les llamó “Las Colmenas”.

SOLEDAD LARA LLEGA A LA LOGIA
Soledad llegó a la Logia y nos llevó a una de sus casas en el Barrio Santa Anita, al sur de San Salvador. Allí estábamos un poco mejor pero bastante alejados, pues se trataba de un área recién abierta para nuevas construcciones habitacionales. Había malos caminos, poca iluminación y mal transporte. La asistencia disminuyó.

SOLEDAD SE ENFERMA
Me parece raro este incidente en la vida de Soledad. Posiblemente por exceso de trabajo, sufrió una pérdida de conocimiento en forma súbita; cayó en coma y con una hipoplejia lateral izquierda, fue internada en un hospital privado y con un costoso y largo tratamiento recobró poco a poco el conocimiento quedándole sólo una ligera parálisis facial que en el resto de su vida le volvía aparecer temporalmente. Debido a que su estadía en el hospital fue muy costosa, de su capital le quedó sólo un pequeño remanente de tres mil colones para empezar de nuevo sus negocios y además, los médicos le recomendaron una vida más tranquila, menos agitada. Decidió entonces buscar otro sitio donde vivir que estuviera fuera de la ciudad. Buscaba algo así como una villa, un pueblecito. Y en efecto, encaminó sus pasos hacia el norte de la ciudad… hacia Ayutuxtepeque. Este era un pequeño caserío, de clima fresco y tranquilo, al que se llegaba por un camino vecinal de tierra, con grandes árboles franqueando sus costados; pocas camionetas llegaban hasta él, pero llegaban.
Con el deseo de comprar un lote en Ayutuxtepeque Soledad tomó una camioneta buscando  con mucha atención a uno y otro lado del camino y al llegar al caserío, encontró uno que lo vendían y le encantó. Exclamó entusiasmada y en voz alta… ¡Qué lindo lote! ¿De quién será?  ¿Cuánto querrán por él? y casi inmediatamente oyó una voz que le dijo: es mío se lo vendo por tres mil colones. La señora que le habló compartía con ella el asiento. Compró el lote con el único dinero que le quedaba… Soledad se reía cuando relataba el incidente.
En un futuro la Logia “Teotl” comenzaría a tener forma.
Atendiendo a la invitación de Soledad nos trasladamos a Ayutuxtepeque. Era una grande, ubicada en un buen lugar, con un buen clima, aire fresco, mucha vegetación, más belleza natural, poco vecindario, además con buen servicio de camionetas.
Nos acomodó en la sala que, además de tener luz, era amplia. Estábamos muy alegres. Nuestro presidente era casi siempre el Hno. Juan Felipe Toruño, pues era el hermano más antiguo, con un temperamento autoritario y el que más sabía por lo que era muy querido y respetado, confiábamos en sus decisiones que, a juzgar nuestro, eran sabias.
Volvíamos a ver nuestra casa otra vez llena de gente, casi todos éramos conocidos, éramos teósofos.
Pasó el tiempo y Soledad pensaba que valdría la pena construir un edificio ad hoc para la Logia. Se miraba la parte del terreno que estaba al sur de la casa. Pero tenía el inconveniente de no ser parejo. Sin embargo Soledad resolvió el problema diciendo que la tierra que se removería, serviría para hacer los ladrillos que se ocuparían para las paredes.
Por fin, Soledad se decidió. Donó la parte del terreno y lo único que quedaba era levantar el templo y a ello nos dedicamos con ardor y entusiasmo.
Por este tiempo, aparecieron los hermanos Loenholdt. Él era de origen alemán, radicado en Estados Unidos. Tenía un doctorado en Economía Agrícola. Trabajaba para las Naciones Unidas en la sección de economía agrícola para El Salvador. Su esposa era norteamericana. Nacida en Filadelfia. Dibujaba y pintaba. Daba clases de inglés en el Colegio El Salvador-Estados Unidos. Ambos eran teósofos. Sabían mucho.
Cuando ellos llegaron nos inyectaron con su entusiasmo en el trabajo de la construcción del templo. Eran personas amabilísimas, de costumbres sencillas. Se ganaron el cariño nuestro. ¡La Logia no los podrá olvidar nunca!
El Hno. Ing. Gonzalo Moreira trazó los planos y el Ing. Rafael Sosa, guatemalteco, esposo de una hermana del Hno. Alfredo Rodríguez, dirigió la construcción del techo que se hizo con las más finas maderas que se encontraron.  Las paredes se levantaron con los ladrillos que fabricaba Soledad. Todos contribuimos, no sólo con nuestro trabajo durante los fines de semana, sino también con cierta cantidad de dinero mensual que dábamos. Además, el Hno. Toruño recogía donaciones que hacían a la Logia las personas con ideas afines ya fueran capitalistas, comerciantes o industriales.
Por la misma fecha, a finales de la Primera Guerra Mundial, arribaron al país el Ing. Gunther Deja, su esposa Anne Deja (pianista) y sus hijas Constance y Aurely. Eran alemanes. El ofreció sus servicios al gobierno por lo que le dieron un contrato. Estuvo en nuestro país aproximadamente seis años, luego se marcharon a Honduras. Todos colaboraron con nosotros en lo que hubiere que hacerse.
Por fin quedó el edificio definitivamente terminado con una donación que nos hizo el Presidente Coronel Oscar Osorio.
Con la dirección de la Hna. esposa de Fritz Loenhldt pintamos los muebles y las paredes de la sala principal. Pusimos adornos y la Logia presentaba un bello aspecto.
Fritz Loenhldt falleció en Estados Unidos, California, el 7 de septiembre de 1982 (un año después de su esposa). Sus cuerpos fueron incinerados por su propia decisión y sus cenizas se esparcieron sobre las aguas del océano Pacífico.

DE LOS DEMÁS MIEMBROS

Fuera de los ilustres hombres que la fundaron, los Hnos. Loenholdt, Deja y Soledad, quedan por recordar una enorme cantidad de hermanos distinguidos en todos los ramos del quehacer humano. Para tal efecto citaré aquellos que están a nuestro alcance y para quienes va nuestro recuerdo cariñoso:


Alicia Soriano.
Hortensila López Barrios.
Alfredo Rodríguez.
Haydee Vives López.
Alberto Rosales.
Javier Morales.
Abelardo Molina.
Jorge Ramírez.
Absalón Baldovinos.
Juanita Soriano.
Anne Deja.
Juan Felipe Toruño.
Alfonso Sandoval.
Julio César Guillén.
Aurely Deja.
José Salomé Hernández.
Carlos Monterrosa.
Jacinto Aguilar.
Carlos Gil.
Lisandro Hernández.
César Ojeda.
Leonor Chacón del Vidal.
Carlos Martínez.
Maximiliano Martínez.
Carlos Dárdano Zepeda.
María Ofelia Montalvo.
Carmen Brannon.
María Isabel Dárdano.
Cely de Salarrué.
Nasario Spriano.
Catalina Carvallo de Menéndez.
Oscar Ordoñez.
Claudia Chacón.
Pedro Ruíz.
Cándido Morales.
Pablo Ortel.
David Escalante.
Ramón Cristóbal Giralt.
Dolores de Escalante.
Rafael Heradia Reyes.
Dora de Morales.
Rafael Mónico.
Delia Umaña.
Ricardo Gil.
Estela de Pineda.
Salvador Sagastizado.
Ella Ruth Rostau.
Teresa Meraso.
Eduardo Casanova.
Teresa Villatoro.
Ernesto Pavón.
Vicente Guillén.
Emili García Narvaes.
Zoila de Cañas.
Ernestina Aguilar.
Zoila de Hernández.
Elba de Rodríguez.
Gonzalo Moreira.
Felipe Viaud.
Guillermo Argueta Bernal.
Federico Rinker.
David Taleno.
Gunter Deja.
Antonio Adolfo Aguilera.
Hugo Rinker
Rosa Alba Marroquín de Bolaños.
Hersilia Hernández.
Jorge Merazo.
Hipólito Gamero.

Al examinar los acontecimientos que precedieron como los que sucedieron a la fundación de la Logia “Teotl” llama la atención la oportuna aparición de incidentes que resolvían los problemas. Todo se movía favorablemente como atendiendo la intención básica de fundar una logia estable, fuerte, un centro magnético de primer orden para la región centroamericana.
Creemos que la Logia “Teotl” es una logia privilegiada y que su perennidad y prosperidad se ha debido a la protección divina.
Esperamos que la siga teniendo para el mejor desempeño de sus funciones a favor de la humanidad y la labor de los Maestros de Sabiduría.

Atto. Alfredo Rodríguez Velásquez.


En el año 2010 nos inspiró el propósito de añadir a esta historia los datos que se dieron luego de la partida de los hermanos que formaron parte de aquella época.
Así, los Hnos. José Roberto Hernández, Rafael Arévalo, Aura Elena Pozas de Martínez y Beatriz Elisena Martínez Pozas procedimos a revisarlos y mencionar en ella los acontecimientos que consideramos más importantes.

La historia de la Logia “Teotl” estaría incompleta si no agregáramos a ella el inicio de una nueva época. Esta parte podemos escribirla a partir del año de 1988 con la llegada de los hermanos José Roberto Hernández, Oscar Orlando Hernández, Víctor Manuel Pineda, Aura Elena Pozas de Martínez y Domingo Serrano Leiva.
A partir de esta fecha fueron llegando a nuestra Logia otros hermanos que, sintiéndose atraídos por las enseñanzas teosóficas, se fueron incorporando a la Sociedad  y se quedaron…
Hnos.  Beatriz Elisena Martínez Pozas.
         Marco Antonio García.
         Raúl Alberto Hernández.
Yohalmo Granados.
         Ana Jancy Martínez.
         Guadalupe Estrada.
         Rafael Arévalo.
         Glenda Carolina Zacatales (llegó a sus lindos 12 años de edad).
         Rosa Marina García.
         Mirna del Carmen Grijalva.
         Pedro Rafael Arteaga.
         Álvaro Darío Lara.



Actividades importantes durante esta nueva época:
Conferencia de expansión teosófica entre cuyos expositores internacionales están:
Hnos.  Isaac. Jauli Dávila. (España-México)
         Terezinha Franca Kind (Brasil)
         Nicolas Kind (Holanda)
         Magaly Polanco (República Dominicana)
         Lissete Arroyo (México)
         Terry Hunt (Estados Unidos)
Un acontecimiento de gran relevancia en la Logia Teotl fue la celebración de la Primera Convención Centroamericana, realizada en el mes de octubre de 2007 y promovida por La Federación Teosófica Interamericana FTI, bajo la dirección de la Presidenta Hna. Terezinha Franca Kind.

En esta oportunidad tuvimos la visita de Hnos. de Centroamérica, México, Brasil, Estados Unidos, Holanda, Puerto Rico, República Dominicana.


De pie, de derecha a izquierda: Hnos.: Ondina, Elisena Martínez, Lissette Arroyo, Roberto Hernández, Ricardo Basurto, Yohalmo Granados, Hno. Gauggel, Mario Rizo, Francisco Mayorga, Eladio Polanco.
Segunda fila: Elba Elena Chávez, Aura Elena de Martínez, Marco Antonio García, Gloria Arévalo, AliRitsema, Magaly Polanco, Hna. Representante de Nicaragua, María Orlich, Hna. Representante de Costa Rica, Lorena Howell, María Luisa Salazar.
Sentados de derecha a izquierda: Rodolfo Garbalosa y esposa, Hna. Representante de Honduras, René, Terezinha Franca, NeldaSamarel, Gabriela Gauggel, Elena Hill, Hna. Representante de Guatemala.
Debajo de derecha a izquierda: Isabel Sánchez, Rubén Gago. 


CENTENARIO DE LA LOGIA TEOTL

Con un acto especial fue celebrado el Centenario de la Logia Teotl. Se descubrió la cámara del ladrillo que contenía un pergamino firmado por los hermanos de esa época.
Para cerrar tan feliz aniversario se realizó un convivio con miembros e invitados en la sala de té “Balché”.


OTROS ACONTECIMIENTOS
El día 9 de diciembre de 2010, tuvimos la visita de los Hnos. Mario Rizo, presidente de la Logia Blavatsky de Nicaragua, y Ligia Gutiérrez Secretaria Organizadora para Centroamérica (2010-2011) con el objetivo de estrechar los lazos fraternales con los miembros de la Logia Teotl. 
Por primera vez en la historia de la Logia Teotl, con la ayuda del Hno. Álvaro Darío Lara y con la gentileza de Doña Betty Suárez de Peague propietaria de  Radio El Mundo de El Salvador, se tuvo la oportunidad de que los Hnos. Aura Elena Pozas de Martínez, Rafael Arévalo, Roberto Hernández, Elisena Martínez y Raúl Hernández participaran en diferentes entrevistas realizadas en dicha emisora con el fin de dar a conocer los objetivos e ideales de la Sociedad Teosófica.
La presente edición fue cerrada en el mes de julio del año 2011, durante la celebración del Centésimo Décimo Primer Aniversario de la Logia Teotl. Momento que se aprovechó para colocar el recuerdo que los nuevos miembros dejan en la cámara secreta que se debelará en el año 2110.